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Revisa opiniones y testimonios de pacientes, que te ayudarán a conocer la reputación y calidad del trabajo de los cirujanos plásticos.
Asegúrate de que los cirujanos que consideres sean miembros de organizaciones profesionales, como la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (SECPRE) o la Asociación Española de Cirujanos Plásticos (AECEP). Estas organizaciones suelen tener requisitos rigurosos en cuanto a formación, experiencia y ética.
Programa consultas iniciales con al menos dos o tres cirujanos plásticos de tu lista. Durante estas consultas, evalúa su enfoque y comunicación, pregúntales sobre su experiencia y resultados previos, y asegúrate de que te sientas cómodo/a con ellos.
La duración de los resultados de un aumento de senos puede variar según el individuo y el tipo de implantes utilizados. En general, los implantes mamarios no están diseñados para durar toda la vida. La mayoría de los fabricantes de implantes ofrecen una garantía de alrededor de 10 a 15 años, pero algunos implantes pueden durar más tiempo sin problemas.
Factores que pueden afectar la duración de los implantes incluyen:
Tipo de implante: Los implantes de silicona tienden a tener una mayor durabilidad que los implantes de solución salina, aunque esto puede variar según la marca y el modelo del implante.
Complicaciones: Algunas complicaciones, como la contractura capsular, pueden requerir la remoción o el reemplazo de los implantes antes de lo esperado.
Cambios en el cuerpo: Los cambios en el cuerpo debido al envejecimiento, el embarazo, la lactancia o la fluctuación de peso pueden afectar la apariencia de los implantes y requerir ajustes o reemplazos.
Preferencias personales: Algunas mujeres pueden optar por cambiar el tamaño o el tipo de implantes en función de sus preferencias estéticas a lo largo del tiempo.
El precio para un aumento de pecho puede variar según varios factores, como la ubicación, el tipo de procedimiento, el cirujano y la clínica seleccionada.
En general, el precio puede variar entre 4.000 y 7.000 euros, aunque algunos casos pueden ser más económicos o costosos, dependiendo de las circunstancias específicas.
Evitar levantar objetos pesados y realizar esfuerzos físicos: Durante las primeras semanas después de la cirugía, no levantes objetos pesados ni realices actividades físicas extenuantes que puedan ejercer presión sobre tus senos y el área de la incisión.
No dormir boca abajo: Durante la recuperación, trata de dormir boca arriba o de lado para evitar ejercer presión sobre tus senos.
No fumar: Fumar puede interferir con la cicatrización y aumentar el riesgo de complicaciones. Evita fumar antes y después de la cirugía, siguiendo las recomendaciones de tu cirujano.
No saltarte las citas de seguimiento: Es importante asistir a todas las citas de seguimiento con tu cirujano para asegurarte de que todo esté sanando correctamente y abordar cualquier posible complicación a tiempo.
No usar sostenes con aros o push-up: Los sostenes con aros o push-up pueden causar irritación o presión en la zona de la incisión. En su lugar, utiliza sostenes quirúrgicos o deportivos recomendados por tu cirujano hasta que te indiquen que puedes volver a utilizar tus sostenes habituales.
Evitar sumergirte en agua durante las primeras semanas: No te sumerjas en bañeras, piscinas o jacuzzis hasta que tus incisiones estén completamente cerradas y tu cirujano te lo permita, para prevenir infecciones.
No exponer las incisiones al sol: La exposición al sol puede causar que las cicatrices se oscurezcan o se vuelvan más notorias. Evita la exposición directa al sol en las áreas de las incisiones durante al menos un año y utiliza protector solar cuando estés al aire libre.
Primeras semanas: Durante las primeras semanas después de la cirugía, es normal que los senos estén hinchados, tensos y posiblemente altos en el pecho. La inflamación y la tensión irán disminuyendo gradualmente a medida que los tejidos se relajen y se acomoden a los implantes.
Primeros meses: A lo largo de los primeros meses, los implantes comenzarán a "asentarse" en su posición final en el pecho. Este proceso, también conocido como "drop and fluff", es cuando los implantes bajan y los tejidos mamarios se adaptan y cubren los implantes de manera más natural.
De 3 a 6 meses: Por lo general, alrededor de los 3 a 6 meses después de la cirugía, los senos tendrán una apariencia más natural. Sin embargo, el proceso de asentamiento puede continuar durante varios meses más y, en algunos casos, hasta un año.
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